ayer bajé GO NEKO!, el primero y el que acaba de salir. el Jotacé descubridor de bandas me había tentado, sus invitaciones siempre dan en el blanco, como cuando corregíamos esas formas en que había construido frases alguna vez. ¿se puede ir más alto en el flotar de una relajación? me puse a ver las fotos de un amigo mientras tanto, y la cabeza comenzó a latir. o los colores o la rareza de las notas combinadas: el punto G del indie grunge a base de guitarra sin voz. o con voz acuática. un barullo mojado cayendo en forma de lluvia por todos lados, de la nada. hay una dirección introspectiva en cada tema concatenado con la que el grupo se endroga trabajando para salirse de sí hacia cualquier límite. me levanté después de dejarle un comentario menor al blog que visitaba. muchas noches se construyen en mi casa con la proyección de una inminencia. en casos como ese es mejor un té de aromas antes de bajar a dormir.